sábado, 30 de abril de 2011

MICRO-HOMENAJE A SÁBATO A TRAVÉS DE CORTÁZAR

La luz después el TÚNEL
Al final del TÚNEL me enfrenté temerosa a la escalera. No la pisé, pues no tenía las instrucciones para subir y bajarla. Decidí volver sobre mis pasos y a oscuras anduve hasta el principio del TÚNEL para alongarme a recuperar el cabello perdido en un laberinto de alcantarillas. Parecía yo una perseguidora saxofonista que llegaba tarde al trabajo. Este último se convirtió en un TÚNEL sin salida.
Descanse en paz en una tumba de héroes luminosa llena de Famas, Flores y Cronopios argentinos.

miércoles, 27 de abril de 2011

MICRORRAYADA...¿O MICRORRALLADA?

             Mi abuelita llamaba ‘almengras’ a las almendras y ‘cirguelas’ a las ciruelas; mi madre llama a Meg Ryan, Mil Rayas y  la canción de Dire Straits, ‘So Far Away for me’ la canta pronunciando perfectamente  una ‘Sopa de buey pa’ mi’.
            Yo, sin embargo, soy trascendental, súper culta e infértil, pues soy nieta e hija pero no tengo retoños que hereden mi primera fase del Alzhéimer,  ni tampoco mi dinero.
           Aunque de niña decía ‘demogracia’. Supongo que era tan superdotada que me hacían ya mucha gracia los temas relacionados con las maneras de gobernar. Aunque mi madre siempre dijo, contradiciendo a los profesores, que yo era superagotada. Y es que ahora me parto la caja (se entiende por toráxica, pues la tele no la parto ni loca, que para eso es plana y me ray/llo menos) y no me canso de partírmela pues las democracias modernas me producen una inflamación en las fibras nerviosas y a la vez que me muero de la risa, me sobresalto por tanta falsedad disfrazada con  traje y corbata aCAMPSando por sus anchas.
           En realidad soy corta, mi mamá tenía razón con lo de superagotada, pues no entiendo las monarquías parlamentarias, las demogracias, las dictaduras ni tampoco las dictablandas. ¿Cómo tener retoños para explicarles tantas mentiras? ¡Es que hay que tener valor para ello!
          Ahora, callo y me sigo ray/llando. Y no es que esté como ausente, on the contrary, estic molt presente. ¿Será por eso?


          Bueno, me voy a ray/llar una zanahoria a ver si me mejora la memoria.


PD: Los señores de la Real Academia deberían habernos aclarado con un buen guiÓn cuando nos confundieron con la elle y la ye qué raya es qué ralla.


¡Vivan las mujeres de la Real Academia, pues son mayoría absoluta!

jueves, 21 de abril de 2011

YO OPINO... DE 'FUTBOL', AGRADOS Y DESAGRADABLES

No cabe duda de que el tema de hoy y de durante el resto de la semana tratará de algo que se llama deporte rey y que parece ser que es el único que existe. Ya sé, ya sé, es un deporte de masas, es un deporte que arrasa... Pero no, no nos engañemos, no es el deporte en sí lo que arrasa. Hoy en día y desde hace ya décadas, el fútbol ha perdido la categoría de 'deporte rey'; debería ser conocido como 'negocio rey'.
Me atrevo a hacer la crítica pues soy seguidora de muchos deportes y no por ser crítica dejo de ver y seguir los partidos y a los equipos. Creo que eso me da derecho a opinar con más razón pues lo gozo y lo sufro, como muchos de los espectadores.
Si ya en una opinión anterior dejo clara mi antipatía por Arturo Pérez Reverte, sobre todo por su manera de tratar al resto de los mortales, mi rechazo se multiplica por infinito nada más aparecer una cana del llamado 'señor' Mourinho por la pantalla. Ufff, qué mal ejemplo para los niños, para los jóvenes y para todos los seguidores de los deportes. No me gusta pues es la mejor muestra de la falta de valores. Los valores parecen ser incomplatibles con el éxito y con esas sumas incontables de dineros que les pagan por ser desagradables, insolentes, insultantes y maleducados. La prepotencia es suprema en este señor. Su antítesis era el señor Pellegrini, pero parece que no gusta la modestia, la elegancia y el saber estar.
Que se sepa que hay amantes del deporte que seguimos teniendo en cuenta los valores como el respeto, la modestia (que no falsa), la honradez, la humildad, el afán de superación sin humillar al contrario... y todos esos valores de los que ya se nos ha olvidado hasta el nombre.
No tengo la sensación de que este llamado señor Mou sienta los colores del Madrid, más lo veo como un mercenario del deporte, un hombre que gana por sueldos desorbitantes una serie de partidos y que piensa sólo y nada más que en él, que hace listas negras de fallos de los árbitros sin mirar la 'doña Perfecta' cuáles han sido los suyos. El que nunca se equivoca, ese, es el peor. Ese que se presenta a una rueda de prensa con un ayudante pues no le da la gana hablar: burlesco como él sólo. No se tenían que haber marchado algunos periodistas, tenían que haberse marchado todos, pues Dios, a dios, lo encontramos en las iglesias...y nos habla en silencio, no con un santo al lado repicando la lección.
Y lo tendremos que sufrir hasta que acabe la liga. ¡Qué ganas tengo de que desaparezca de nuestros telediarios!
Por cierto, ¿se acuerdan que Rafa Nadal es nº 1 del tenis mundial? ¿Saben que un equipo español femenino de Baloncesto, un equipo de Castilla y León, el Halcón Avenida de Salamanca,  es campeón de Europa? ¿Existe aún la gimnasia rítmica, la deportiva, el patinaje artístico, el rugby, la vela, el surf, el windsurf, el atletismo, el ciclismo, la lucha canaria, ...
Yo soy fiel a la UD Las Palmas, esté en 1ª, 2ª o regional, por si alguno pensaba que estaba jugando a la guerra entre Madrid- Barça. Eso sí, para mí, este último sí que juega al fútbol.
Por cierto, ¿habrá ido Belén Esteban a celebrar la gesta de haber conquistado la copa del JuanCa (con cariño, eh) a la Cibeles con su Family? ¿Se habrá subido al monumento faltándole el respeto a la historia y al arte por ponerle una bufanda blanca a tamaña escultura y símbolo de Madrid como ciudad monumental? Me parece que esto último no, que para eso hay que ser futbolista, es lo único que da licencia para trepar por la diosa. Espero que al menos se quiten las zapatillas de tacos y clavos, pues si no la Cibeles nos va a durar menos que el Koala en sus mejores tiempos.
Me voy a ver 'Sálvame' a ver si me entero por dónde anda Belén.

viernes, 8 de abril de 2011

YO OPINO ... DE ADOLESCENTES Y JUSTIN BIEBER

No deja de rondarme en la cabeza. Sí, sí, Justin Bieber.

Aún no sé qué pensará Belén Esteban de este agradable muchacho que llega a España y va a la rueda de prensa con la capucha puesta y con el discurso aprendido.
Yo, la verdad, es que opino que le falta crecer y madurar. Sin embargo, no me preocupa ni lo más mínimo el futuro de un muchacho canadiense, aunque es bastante previsible. Lo que me preocupa y mucho es que este muchacho insulso /beibi, beibi, beibi, ahhhhh/ tenga vueltas locas a las adolescentes españolas y la permisividad de sus padres.
Cuando yo era adolescente era impensable faltar al colegio o al instituto. Era nuestra obligación y nuestro derecho y con eso no se jugaba. Pero hoy en día, resulta que veo escandalizada imágenes de niñas, madres y algún padre haciendo cola durante días para obtener una entrada y un buen sitio en el concierto del Justin. Y claro, esto se veía con los Beatles o los Rolling Stones, pueden contraargumentar algunos. El problema es que estas niñas tenían permiso para faltar al instituto, es decir, hacían cola en días que tenían que estar en clase. El error es que la mayoría de los padres lo han permitido, lo han consentido..
Esto se traduce en que muchos adolescentes no le dan a sus estudios la importancia que se merecen. No se dan cuenta de que no abandonarse en el pupitre, que hacer sus deberes y prepararse sus exámenes es la obligación que tienen en esta etapa de sus vidas. No nos encontramos adolescentes que digan que no quieren estudiar y sí trabajar, no, ni estudiar, ni trabajar. Todo ello, sumado a un insistente ‘me aburro’, a un taladrante ‘estoy cansado’ y a un vocabulario difícil de corregir hace que me vuelva a preguntar qué pensará Belén Esteban de esto y si ella dejaría a su hija Andrea que faltara a clases porque su ilusión es ver al Justin Beibe, Beibe, Beibe, aahhh.
Más adelante muchos padres se preguntarán: ¿qué he hecho mal, si le he dado todo lo que quería?
Por cierto, yo me quedo con Lady Gaga y con los artistas callejeros.
Mientras, Revolución y guerra en el norte de África, terremotos y tsunamis en Japón, Haití en una espiral sin salida, ...

lunes, 4 de abril de 2011

LA GATA LOLA

Lola me arañó la mano cuando yo quería que me acariciara el alma.

Me esperaba con los ojos felinos más que abiertos y triangulándome con un alto grado de precisión. Una mirada que lo decía todo, más una pose señorial sobre su elegante sillón.

La traté con respeto, pues me imponían sus finas y delicadas agujas. Me gané su confianza y se acomodó entre mis piernas. Yo, sabiendo de su oído superlativo, sólo le susurré delicadamente:

- Hola Lolita, mientras me emocionaba por el calor que desprendía su pelaje sobre mis piernas. Me había costado más de un año que Lola se me acercara.

Lola no se durmió, como yo creía. Osé acariciarla. Me costó sangre y cicatriz en mi mano.

¡Me dio rabia!

Me marché enojada de su casa. ¡Estaba harta de que me engañaran!

La mañana siguiente me marchaba a trabajar. Mientras esperaba el ascensor, vi a Lola triangulándome con un alto grado de precisión desde la escalera. Se la veía serena, pero no me quise acercar. Ya no me fiaba de ella, estaba completamente enojada, frustrada y decepcionada con la gata.

- A pesar de todo, sigue siendo el felino más bello que he visto en mi vida, pensé mientras bajaba al portal.

Lola me recordaba a la afortunada gata que se posaba sobre el cuello de Audrey Hepburn en Desayuno con diamantes. Me imaginaba ilusionada que Lola tuviera esa confianza conmigo. ¡Qué elegancia!

Volví a casa tarde. El trabajo me había agotado mentalmente. Fueron demasiadas horas frente a los libros y la pantalla del ordenador. Se abrió la puerta del ascensor en mi planta. Cuando apuntaba con la llave a la cerradura de mi puerta, noté que unos ojos felinos me triangulaban por la espalda con un alto grado de precisión.

No me dio tiempo a pensar. Me desperté en el hospital, acostada en la cama boca abajo mientras un enfermero me hacía curas y me volvía a sedar.

La gata Lola me arañó el alma.